No tengo fuerzas para rendirme

 

Es lógico que a solo 96 horas desde que los venezolanos ejerciéramos nuestro derecho al voto aún quede en la garganta de
quienes se sienten “derrotados” una sensación de opresión difícil de diluir. Sin embargo, es necesario analizar de manera equilibrada cual fue el mensaje que el país entero le envió (a través del voto) tanto a los miembros del gobierno como a los de la oposición.

            Es importante destacar en primer lugar, el compromiso y la alta voluntad ciudadana que sobrepasó el 80% de participación de los electores inscritos, pero aún no deja de sorprendernos como, hoy por hoy, casi 4 millones de venezolanos se nieguen el derecho a ejercer un logro social que costó siglos y siglos de lucha a nuestros antepasados conquistar.

Con un poco más de calma, analizando los resultados Estado por Estado y basándome única y exclusivamente en números y proyecciones puedo decirles con toda confianza que el juego democrático aún sobrevive en Venezuela. Nuestro país se prepara para una lucha bastante difícil para los dos bandos que hacen vida activa en nuestra sociedad: Oposición y Oficialismo.

Este humilde servidor es capaz de decirles por medio de este escrito que hoy, 11 de octubre de 2012 (basándome en un análisis
estrictamente estadístico), tenemos la posibilidad real de ganar por medio de Votos entre 10 y 13 gobernaciones de las más importantes a nivel nacional como lo son: Amazonas, Anzoátegui, Bolívar, Carabobo, Lara, Mérida, Miranda, Monagas, Nueva Esparta, Táchira y Zulia. Y pendientes con Aragua (algo difícil pero posible), Barinas y Delta Amacuro. Todo va a depender de la postura que tomemos. Es el momento de demostrar nuestro coraje, nuestra valentía. El peor vencido es el que se oculta en la derrota, el peor derrotado es el que se oculta en la retirada. Es momento de plantar una lucha democrática que nos permita restituir el Estado de Derecho y de plena tolerancia. Solo los valientes harán que este hermoso país vuelva a sembrar cimientos de Libertad y Democracia.

 Es importante decirles que día a día lucho contra una generación que toma como decisión huir, escapar, olvidar. Ya son varios a quienes les he escuchado decir "Haré las maletas, ahora si me voy". Lucho día a día contra una generación que piensa que para ocupar puestos estratégicos solo hace falta una buena conexión. Lucho todos los días por demostrar que el verdadero líder se hace formándose y nutriendose de experiencias. Es importante comprender que no todo está acabado y que ahora, más que nunca, debemos inyectar de energía a más de 6 millones de Venezolanos conscientes de que el CAMBIO debe y tiene que llegar.

Saludos

M. Sc. Gilberto Gudiño Millán
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