CUBANOS EN FUERTE TIUNA

Pablo Medina denunció este domingo la presencia en Fuerte Tiuna de un contingente militar de 4.500 hombres al mando del general de división cubano Leonardo Valdés. Aseguró que se trata de una “invasión planificada y ordenada por el gobierno de Cuba con el beneplácito del inconstitucional gobierno de Nicolás Maduro”.

Se pregunta también, en un manifiesto al pueblo venezolano, si la presencia de estas fuerzas militares tiene como propósito “reprimir las legítimas protestas de los ciudadanos venezolanos ante el vacío de poder y la situación de anarquía que vive el país”.

A continuación el Manifiesto de Pablo Medina:

¡Venezolanos, hoy más que nunca peligra nuestra nación ante la bota extranjera! y, democrática y constitucionalmente, todos estamos llamados a defenderla. Venezuela recibió el año 2013 con una invasión de tropas cubana; un contingente de 4.500 hombres de infantería organizados en ocho batallones de 500 efectivos cada uno y un escuadrón estacionado en Fuerte Tiuna, al mando del General de División cubano, Leonardo Valdés.

Invasión planificada y ordenada por el gobierno de Cuba con el beneplácito del inconstitucional gobierno de Nicolás Maduro. ¿Es acaso esta fuerza invasora para reprimir las legítimas protestas de los ciudadanos venezolanos ante el vacío de poder y la situación de anarquía que vive el país?

¿Acaso es el conocimiento que tiene Maduro de que nuestra Fuerza Armada Nacional Bolivariana institucional se niega a disparar contra los ciudadanos ante los inminentes y justos reclamos de trabajadores, estudiantes, sociedad civil, empresarios, transportistas, la voz de las familias ante la escasez de alimentos y la criminal inseguridad ó son sus temores ante un estallido social provocado por ustedes mismos? O es cardinalmente una entrega al modelo castrista.

Al comienzo de su gobierno Hugo Chávez expulsó del país, la misión militar de Estados Unidos ubicada en Fuerte Tiuna- misión que no tenía ejército- desalojo que fue respaldado por la Fuerza Armada venezolana y hoy, el gobierno ilegítimo de Maduro que quiere imponer el patrón político de la Habana en Venezuela, abrió las puertas a la invasión.

Esta aberración de Maduro es apoyada por una minoría del Alto Mando, pero rechazada por la gran mayoría de la Fuerza Armada Nacional que se halla alerta para cumplir y hacer cumplir los mandatos de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, en cuanto a nuestra soberanía como país.

En la historia democrática de nuestra nación, la Fuerza Armada Nacional siempre se halló representada por el Presidente de la República como Comandante en Jefe, pero en los actuales momentos se encuentra acéfala; precisamente por este vacio es que me dirijo a todos los oficiales y soldados de los cuatro componentes militares sobre este hecho anormal ¡Maduro no es el Comandante en Jefe de la FANB! ya que en ninguna parte la Carta Magna concede atribuciones al vicepresidente para dirigirla, como
lo establece para el Primer Mandatario, electo por votación popular, en su artículo 236: en el 5- “Dirigir la Fuerza Armada Nacional en su carácter de Comandante en Jefe, ejercer la suprema autoridad jerárquica de ella y fijar su contingente”. Maduro como vicepresidente carece de estas facultades y al hacerlo estaría quebrantando la Constitución y usurpando funciones.
Instamos al gobierno de Raúl Castro que deje de trabajar en la sombra y se pronuncie en lo que aquí denuncio y a los sectores de oposición que no tienen respuesta, les exigimos contundencia ante estos hechos, comenzando por demandar el retiro inmediato de la bandera cubana de las oficinas públicas.

Cómo es posible que una República que lleve el nombre del Libertador Simón Bolívar y una bandera tricolor que trajo el Generalísimo Francisco de Miranda pretendan sustituirla por la bandera de Cuba ¡Que diría el prócer José Martí quien dio su sangre por la libertad! Y qué diría de esta invasión de un modelo cubano de dominación contra un pueblo que en la historia se caracterizó por ser libertario ¡Qué sacrilegio!

Oficiales de las FANB, las hojas de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela han sido manchadas cuando la Sala Constitucional del TSJ dicta la torcida sentencia de Continuidad Administrativa a su conveniencia; primero aplicando este criterio sustituye a siete Magistrados a quien se les había vencido el período, por siete suplentes y luego, con una retorcida interpretación, le concede Continuidad Administrativa a Maduro, a quien su período como vicepresidente culminó el 10 de Enero.

Lo medular del caso es que este evento nos ubica en una evidente inconstitucionalidad, ya que al no haber juramentación del Presidente de la República, quien a su vez tiene la facultad de designar y juramentar a los Ministros, Nicolás Maduro preside un gobierno de facto; por consiguiente ¿Le pregunto a usted Ministro de la Defensa, Diego Alfredo Molero, ante quien se juramentó? Y esa misma pregunta deben formularla toda la oficialidad y los soldados de los cuatro componente de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana.

Este vacío de poder producto de la derogación constitucional es rechazada por la mayoría del país y la Fuerza Armada institucional, por ello se explica que Maduro abra las puertas a la invasión de las tropas cubanas ordenadas por Raúl Castro.

Venezolanos, como dijo el papa Juan Pablo Segundo, “despierta y reacciona” contra la usurpación del poder

@pablomedinaml