Editorial
alexisortizb
El sigue impertérrito su campaña optimista entre la
gente
Capriles: sabiduría juvenil
En su libro Conversaciones con Gore Vidal, Robert
Stanton recoge esta lapidaria frase del escritor norteamericano: “Cuando un
hombre llega a convertirse en materia presidenciable, ya ha sido comprado diez
veces. Ya de nada le sirve al país”.
Ahora bien, el a
veces hiperbólico pesimismo de Gore Vidal, no siempre se cumple. La prueba la
tenemos en el joven pero sagaz candidato presidencial de la Unidad democrática
venezolana, el ex diputado, ex alcalde y actual gobernador Henrique Capriles
Radonski.
Este abogado, familiarmente
de origen judío, egresado de la Universidad Católica Andrés Bello de Caracas,
con postgrados en la también caraqueña UCV y en prestigiosas universidades de
Nueva York, Amsterdam e Italia, ha
demostrado que así como se puede llegar a viejo sin aprender nada, también se
puede ser joven y sabio.
Contra el estilo
virulento y avasallante de Hugo Chávez, Capriles desarrolla una campaña sobria,
austera, contundente pero sin violencia verbal. El sabe que los venezolanos están
cansados del ruido inútil y divisionista, de los odios auspiciados por Chávez,
de la furia de unos contra otros.
Capriles, un
candidato electo por el pueblo y no por el dedo abusador de un caudillo o un
cónclave, basa su campaña en el contacto directo con la gente, en las
conversaciones con todos, sin discriminaciones odiosas. Con el mismo interés
escucha a alguien de la oposición como a un chavista.
Contra Capriles
se lanzan agresiones, pero él sigue impertérrito su campaña optimista entre la
gente, ni se atemoriza ni se envalentona. Elude con elegancia las provocaciones
de un Chávez desesperado y estridente, y sigue enarbolando el mensaje
programático de la Unidad democrática, ese que ofrece soluciones concretas y
viables a las necesidades sentidas de la población.
Como funcionario
público Chávez fracasó, es más, ha sido un desastre para Venezuela a pesar de
disponer de todo el poder y todos los recursos. Mientras que Henrique Capriles
Radonski ha sido un servidor público, eficiente, honesto y muy respetuoso de
los derechos de los que lo siguen y los que lo adversan.
Con Capriles,
joven valiente y experimentado, todos los venezolanos tienen un destino, una
posibilidad de encontrar el camino de la alegría y la calidad de vida. Con Hugo
Chávez Frías, es indudable, seguirán los días tristes de la rabia y el miedo.
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