“Una mentira no tendría sentido si la verdad no fuera percibida como peligrosa”.
Alfred Adler.
Alfred Adler.
Una característica fundamental de las personas afectadas por lo que se conoce como el síndrome de Pinocho, en su estado avanzado, es que llegan a alcanzar niveles en los cuales, no pueden hablar, sin incluir en su conversación alguna mentira, sin manipular o tergiversar el hecho real. Se trata de personas que en un momento determinado mienten de forma patológica y compulsiva, sin poderlo evitar.
Estas personas crean en torno a sí mismas, un mundo irreal e imaginario y experimentan grandes dificultades para escapar del círculo vicioso que ello genera. Es obvio que no podríamos determinar si, en el caso de Rafael Ramírez, se trata de una cuestión patológica o compulsiva. Lo que sí podemos asegurar, es que miente cada vez que declara, bien para evitar problemas, obtener un beneficio, compensar inseguridades y ansiedades, sobrevalorarse ante su nefasta gestión o, simplemente, para hacer daño. Como consecuencia, ese hábito de mentir, lo ha llevado a creerse sus propias mentiras y ha creado un mundo imaginario, falso del que no puede salir: una PDVSA exitosa, sólida financieramente, con producción creciente y con una gran credibilidad mundial.
Es obvio que Rafael Ramírez ha encontrado apoyo total, en su Jefe máximo, Hugo Chávez, quien ha institucionalizado la mentira como una política de Estado, conformando la pareja perfecta para urdir las mentiras que ambos requieren transmitir. Lo hacen con gran astucia, guiados por la imperiosa necesidad de fabricar verdades propias y de deformar la realidad, logran enlazar invención y mentira, dejando una sensación de verosimilitud que puede perdurar, a menos que se realice un mínimo esfuerzo por analizar lo expresado.
Por supuesto que existen innumerables declaraciones en medios audiovisuales e impresos que servirían para sustentar, de manera irrebatible, nuestro argumento con relación al dúo Ramírez - Chávez. Sin embargo, vamos a referirnos en esta oportunidad a las declaraciones ofrecidas por el Ministro-Presidente Rafael Ramírez, el 24 de abril de 2012, durante la octava reunión del Órgano Superior de la Faja Petrolífera del Orinoco relacionadas con el anuncio del Plan Batalla de Carabobo de PDVSA y que vinieron a nuestra mente, luego de recibir una copia de la reciente presentación “Venezuela Oil Sector Performance and Scenario 2020” que compartió, en el IESA, el Eco. Ramón Espinasa
Sin duda, un interesante documento en toda su extensión que presenta en una lámina que muestra las diversas tasas de crecimiento o caídas de la capacidad de producción registradas entre 1947 y 2011, es decir 64 años de historia. Allí podemos apreciar tasas máximas de crecimiento promedio para períodos de 12 o 14 años que alcanzan los 140 mil y 135 mil barriles diarios. Podemos añadir que, como experiencia propia, la máxima tasa de crecimiento se alcanzó para el período 1995 y 1997, siendo esta de 250 mil barriles por día interanuales, teniendo en actividad más de 125 taladros, contando con toda la experticia y conocimiento técnico - operacional, realizando cuantiosas inversiones en perforación e infraestructura y contando con los desarrollos de los campos del norte de Monagas y Anzoátegui, recién descubiertos a comienzos de la década de los 90.
Sin embargo, con una PDVSA disminuida, técnica y operacionalmente, con menos de 90 taladros activos, con desembolsos para inversiones limitados, el ministro Ramírez nos dice que:
"Estamos frente a un plan de inversiones muy agresivo, con el que se pretende elevar la producción del país 16,66%: pasar de 3 millones a 3,5 millones de barriles por día. El
Plan Batalla de Carabobo permitirá que Venezuela tenga una producción petrolera para finales del año 2012 de 3 millones 500 mil barriles diarios de crudo”.
Extraordinario ejemplo, porque en una sola frase subyacen varias mentiras. Primero, porque no existe tal plan agresivo, segundo porque la producción actual no es de 3 millones de barriles por día y tercero porque no es posible aumentar en 500 mil barriles diarios el nivel de producción en las condiciones operativas y técnicas actuales. La lámina referida sencillamente resulta una evidencia contundente. Por cierto, este “novedoso” y “agresivo” Plan Batalla de Carabobo, ya nos lo habían presentado con los nombres de Plan Tricolor, Plan Extraordinario de Inversión, Plan Siembra Petrolera y algunos otros tantos que no valen el esfuerzo por recordarlos.
Más adelante el Ministro, nos lanzó esta otra perla, tan inverosímil como la anterior:
“… actualmente la producción de crudo en la Faja Petrolífera del Orinoco es de un millón 200 mil barriles diarios, con un incremento de 120 mil barriles día desde enero de 2012”.
La Faja ha sido convertida, en una especie de leyenda que se ofrece a todos los que, de una u otra manera, son de interés para Hugo Chávez, tal como lo hicieron los aborígenes y El Dorado con los españoles. ¿Cómo aumentamos de 600 mil barriles a 1 millón 200 mil barriles diarios sin haber incorporado un solo proyecto nuevo, sin mejoradores de crudo? ¿De donde sale el diluente?, ¿En que campos y quienes producen esos barriles?, ¿Cuántos pozos se perforaron?, ¿Y las instalaciones e infraestructura?, ¿La electricidad, agua, vialidad, viviendas? Sin duda que el desarrollo de la Faja deberá ser abordado de manera seria, profesional y responsable. Es necesario que el tema de la Faja se afronte en su justa dimensión y se identifiquen las limitaciones inherentes. Recursos, no necesariamente significan producción.
Si bien, nos preocupa muchísimo este tipo de declaraciones que ofrecen personeros oficiales llenas de falsedades, imprecisiones y lugares comunes, también nos preocupa que sean transmitidas por medios de comunicación independientes que deberían, cuando menos, cuestionar, investigar y rebatir, muchas de esas informaciones. Las informaciones oficiales fluyen desproporcionadamente, además de las cadenas de Hugo Chávez que se han vuelto casi diarias, se utilizan más de 250 medios públicos incluyendo 6 plantas televisoras, 210 emisoras de radio y decenas de periódicos. Se trata, ni más ni menos que una hegemonía comunicacional oficialista para manipular los hechos, ocultar los problemas del país y crear “realidades” que no existen, totalmente virtuales y declarativas.
La industria real que se encontrará el próximo gobierno democrático de Venezuela, presidido por Henrique Capriles, nada tendrá que ver con las fantasías que Hugo y Rafael, han creado para engañar. El trabajo será arduo, intenso, complejo y dinámico, pero a corto plazo se verán los resultados de la eficiencia, el conocimiento, la mística, el compromiso de trabajo y la gestión abierta, sin trampas ni corruptelas. Respetando lo que habrá de ser respetado, cancelando lo que atente contra la Constitución y el Patrimonio Nacional. Creando lo que será necesario crear, para impulsar el progreso de un país que acumula catorce años consecutivos en reversa. El camino será de futuro y de progreso.
¿Amigos?
El presidente de la República, Hugo Chávez Frías, recibió el pasado 25 de julio en Miraflores al Ministro de Planificación de Argentina, Julio De Vido y el presidente de YPF, Miguel Galuccio. En esta reunión, Hugo Chávez resaltó el impulso que han dado Venezuela y Argentina a sus relaciones en materia energética, las cuales se fortalecerán con la cooperación entre Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF) y Petróleos de Venezuela
(PDVSA). Hugo Chávez expresó: "Queremos que YPF también participe en la Faja Petrolífera del Orinoco para lo cual elaboraremos un mapa mañana”.
Al final de la declaración, Chávez lanzó una amenaza clara e inequívoca, a Repsol uno de sus socios preferenciales que tiene fuertes inversiones en Venezuela con relación a una demanda contra el Estado argentino por la nacionalización de la petrolera YPF y le recomendó buscar un acuerdo amistoso. “Yo, si me permite Repsol algún consejo, les aconsejaría que lo pensaran muy bien, porque deberían buscar un acuerdo amistoso”.
Sin duda nada bien le han salido las cosas a la española Repsol, abandonaron su campaña de exploración en Cuba, luego de haber hecho cuantiosas inversiones, en una decisión que, de acuerdo a nuestro punto de vista, tuvo una carga política importante, a tan solo días de haberse producido la expropiación (robo) de su participación en YPF-Argentina, cuando el gobierno cubano le brindo apoyo total a Cristina Fernández de Kirchner. Ahora recibe una seria amenaza de otro de sus socios preferidos, en un país donde han realizado cuantiosas inversiones y donde obtienen jugosas ganancias, además de un proyecto de gas muy importante por desarrollar. ¿Qué responderá, Repsol?, ¿Qué dirá el Gobierno español?, ¿Será todavía considerado Chávez amigo de España?
Al final de la declaración, Chávez lanzó una amenaza clara e inequívoca, a Repsol uno de sus socios preferenciales que tiene fuertes inversiones en Venezuela con relación a una demanda contra el Estado argentino por la nacionalización de la petrolera YPF y le recomendó buscar un acuerdo amistoso. “Yo, si me permite Repsol algún consejo, les aconsejaría que lo pensaran muy bien, porque deberían buscar un acuerdo amistoso”.
Sin duda nada bien le han salido las cosas a la española Repsol, abandonaron su campaña de exploración en Cuba, luego de haber hecho cuantiosas inversiones, en una decisión que, de acuerdo a nuestro punto de vista, tuvo una carga política importante, a tan solo días de haberse producido la expropiación (robo) de su participación en YPF-Argentina, cuando el gobierno cubano le brindo apoyo total a Cristina Fernández de Kirchner. Ahora recibe una seria amenaza de otro de sus socios preferidos, en un país donde han realizado cuantiosas inversiones y donde obtienen jugosas ganancias, además de un proyecto de gas muy importante por desarrollar. ¿Qué responderá, Repsol?, ¿Qué dirá el Gobierno español?, ¿Será todavía considerado Chávez amigo de España?
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